Otro principio que aplicaban los primeros cristianos que está relacionado directamente con la Unidad es el “partimiento del pan”, la cena del Señor, mencionado en el mismo pasaje de hechos 2:42.
Esta práctica era llevada a cabo por la gente ya bautizada y una de las cosas que nos enseña es que habiendo sido diferentes y totalmente desconocidos en otro tiempo, ahora al participar de este memorial somos uno solo, una familia, un cuerpo.
Cabe aclarar que muchos estudiosos toman esta frase de hechos 2:42 como una simple comida entre hermanos o convivencia de la iglesia pero el pasaje mismo ya hizo referencia al compañerismo con la frase “comunión unos con otros”, además de que pone al “partimiento del pan” en el mismo grado de importancia que la oración y el estudio de la biblia porque la santa cena fue un encargo que el mismo Jesús nos dejo antes de irse.
Mateo 26: 26-29
26. Y mientras comían, tomó Jesús el pan, y bendijo, y lo partió, y dio a sus discípulos, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo.
27. Y tomando la copa, y habiendo dado gracias, les dio, diciendo: Bebed de ella todos;
28. porque esto es mi sangre del nuevo pacto, que por muchos es derramada para remisión de los pecados.
29. Y os digo que desde ahora no beberé más de este fruto de la vid, hasta aquel día en que lo beba nuevo con vosotros en el reino de mi Padre.
Pero… ¿Cuándo realizaban el partimiento del pan? R=Hechos 20:7…cada primer día de la semana
¿Qué significa participar de la santa cena, del pan y del jugo de uva? R=un memorial
¿Qué recordamos con este memorial? R=El sacrificio que hizo Jesús en la cruz por nosotros para perdón de pecados y regalarnos la vida eterna.
1ª.Corintios 11:23-26
23. Porque yo recibí del Señor lo que también os he enseñado: Que el Señor Jesús, la noche que fue entregado, tomó pan;
24. y habiendo dado gracias, lo partió, y dijo: Tomad, comed; esto es mi cuerpo que por vosotros es partido; haced esto en memoria de mí.
25. Asimismo tomó también la copa, después de haber cenado, diciendo: Esta copa es el nuevo pacto en mi sangre; haced esto todas las veces que la bebiereis, en memoria de mí.
26. Así, pues, todas las veces que comiereis este pan, y bebiereis esta copa, la muerte del Señor anunciáis hasta que él venga.
Recordar el sacrificio de Cristo en la cruz es muy pero muy importante porque al hacerlo reconocemos nuestra incapacidad como seres humanos, nuestra condición pecaminosa y valoramos que Dios tenga un plan para nosotros y nos ame tanto como para darnos el perdón y la salvación de nuestras almas.
A pesar de que había pasado poco tiempo de la partida de Jesús, los primeros cristianos ya tenían bien definida esta tarea: recordar el sacrificio de aquel que los salvo.
Hoy en día con el diario ajetreo, el estrés de nuestras actividades, nuestras preocupaciones y deseos es necesario más que nunca voltear a nuestro creador y recordar lo bueno que es, no solo los domingos sino cada dia que por su bondad nos permita abrir los ojos en esta tierra.
Pregunta del episodio: ¿Te acordaste de Dios Hoy?
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